La cocina y la repostería siempre ha sido una parte vital de nuestra cultura, de lo que nos hace hondureños. En la pandemia de Covid-19 muchos compatriotas han abrazado sus tradiciones culinarias para emprender y lograr salir adelante a pesar de las dificultades. Gabriela Aguilar, con su espíritu de creatividad y salir adelante comenzó su propio negocio de pasteles, que cuenta con diseños únicos.
Gabriela, quien vive en La Paz, es una microbióloga que encontró en la repostería una forma de terapia, de expandir su mente. Hoy ofrece al público diversos pasteles que son tan agradables a la vista como al paladar.
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Tradición pastelera
La repostería es un legado familiar y ella es la cuarta generación de panaderas que usan sus manos para crear deliciosos y hermosos postres. “Mi mamá era panadera de corazón, siempre me emocionó la forma en la que la harina reaccionaba en sus manos… Yo siempre digo que la harina corre por mis venas”, contó a Honduras Tips.
Para ella es un privilegio poder continuar con las tradiciones familiares. La hondureña comenta que luego de enfrentar diferentes situaciones que afectaron a su familia así como a su salud, en la repostería encontró un escape de ayuda y bienestar emocional.
Lo que empezó como un hobby para cocinarle a su familia atrajo a muchas personas que veían sus hermosos pasteles como algo apetecible, para sorpresa de Gabriela. “Yo no me la creía que a la gente le llamara tanto la atención, si yo decía <<Si sólo estoy aprendiendo>>”, dijo con alegría a Honduras Tips.
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Deliciosos pasteles
De boca en boca se ha difundido que los pasteles de Gabriela Aguilar y son una opción increíble. Han tenido una gran aceptación por las personas en especial en el destino donde vive: en La Paz.
Este emprendimiento ofrece una total libertad al cliente de qué pasteles desea. Ya sea un sabor especial o un diseño único, esta emprendedora hará su mejor esfuerzo para satisfacer a su público, que continúa creciendo. “Soy microbióloga de día y pastelera por las noches” ,comenta entre risas.
Tienen muchas opciones que se adaptan a cualquier presupuesto. Asegura que lo que más le conmueve es ver a las personas intentar hacer felices a sus seres queridos con los pasteles más bonitos posibles y ella está feliz de ayudar.
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Creatividad y superación
Esta emprendedora ha sacado lo mejor de una situación como lo es la cuarentena en que vivimos. Con creatividad han logrado salir adelante y hacer crecer su emprendimiento.
Anhela ver crecer este pequeño negocio familiar al punto de que sea un generador de empleo para más personas. De esa manera expandir el círculo y llevar la alegría que venden sus pasteles a muchas más personas.
“Lo que le puedo decir a los emprendedores es que no desmayen, que no siempre las cosas son fáciles. Aprendan, sigan probando esa receta, ese producto al que le hace falta un poco, síganlo haciendo y hagan cada cosa con amor”, agregó con mucha alegría.
Contacto
Si usted está en la ciudad de La Paz, puede adquirir estos hermosos y deliciosos pasteles comunicándose a los números 9913-9050 o 9913-9051.
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