Las variaciones en los trajes son muy pocas, generalmente solo cambian accesorios o los tipos de tela. Estos cambios se dan por las diferentes zonas geográficas de los nativos pero todos en esencia representan lo mismo: cultura, ritmo y amor.
El traje típico más representativo de Honduras es el famoso traje de manta, el cual aún lleva ciertos rasgos típicos europeos.