16. Marrakech, Marruecos
La “Ciudad Roja” de Marrakech es un lugar verdaderamente mágico, desbordante de mercados, jardines, palacios y mezquitas. Explorar la intimidad de los patios y serpentear por los callejones de la histórica Medina puede fácilmente completar tu día.
No existe mejor forma de conocer Medina que literalmente caminar por los muros fortificados: las murallas se pueden recorrer a pie o en bicicleta.
Encuentra la paz interior en el Jardín Majorelle o disfruta de la belleza de una de las mezquitas históricas de la ciudad (ten en cuenta que, a menos que seas musulmán, no se puede ingresar).